¿Qué velocidad necesito?

Muchas veces pensamos que “más es mejor” sin tomarnos el tiempo para analizar nuestras necesidades reales. O, en algunos casos, no tenemos una idea clara de cómo determinar si lo que nos están vendiendo se ajusta verdaderamente a lo que requerimos. Esto suele llevarnos a pagar más por algo que simplemente no necesitamos.

En el mundo de internet, la publicidad nos bombardea constantemente con anuncios como “internet de 300 Mbps” e incluso hasta 1000 Mbps. Pero, ¿realmente lo necesitamos? Vamos a analizarlo detenidamente.

internetspeed

¿Para qué usamos nuestra conexión?

La primera pregunta que debemos hacernos es: ¿Para qué uso realmente mi conexión a internet? Hoy en día es difícil dar una respuesta única, ya que internet se ha vuelto universal y sirve para todo. Sin embargo, existen tendencias de uso claramente diferenciadas que nos pueden ayudar a determinar nuestras necesidades.

Con esta información, prácticamente tenemos todo lo necesario. Según el uso habitual, podemos determinar si somos usuarios intensivos, aquellos que consumen gigas y gigas diarios (y, por lo tanto, requieren alta velocidad), o si somos usuarios ocasionales que pueden prosperar perfectamente con velocidades más bajas.

En este sentido, contamos con una visión clara del uso que nuestros clientes hacen de sus conexiones gracias a nuestros sistemas de DPI (Inspección Profunda de Paquetes), que nos ayudan a medir el tráfico y priorizarlo para ofrecer la mejor experiencia posible al cliente. En líneas generales, el streaming se ha convertido en el servicio dominante en Internet, especialmente en términos de requerimientos de ancho de banda. Actualmente, el consumo de datos en nuestra red se distribuye de la siguiente manera:

Esta información es impactante: si observamos con detalle, el uso de servicios como Netflix, YouTube, Disney+, TikTok y YouTube representa aproximadamente el 60% del tráfico en nuestra red. El resto del tráfico se compone de aplicaciones y plataformas generales como Google, Steam, PlayStation, Xbox Live, así como otras plataformas de vídeo más minoritarias como A3Player, HBO, Prime Video. Y, por supuesto, no podemos olvidar la presencia clásica de PornHub, que siempre se cuela en alguna gráfica, representando cerca del 1,5% del tráfico total.

¿Necesito entonces la mayor velocidad posible?

No necesariamente. Hace ya un tiempo que, con la ayuda del citado DPI y analizando los hábitos de uso de nuestros clientes, elaboramos un estudio sobre el consumo de datos de los principales proveedores de streaming. Puedes leer el artículo completo en este enlace: https://www.wificanarias.com/velocidades-requeridas-por-los-principales-servicios-de-video/

Si te fijas bien, en ese estudio vimos las velocidades requeridas por cada servicio en UN ÚNICO stream de datos, es decir, una única TV reproduciendo contenido. Si, por ejemplo, queremos ver Netflix en 3 dispositivos diferentes en nuestra casa y contamos con el plan HD, necesitaremos al menos 8,4Mbps de velocidad… que suben hasta los 12Mbps si contamos con el plan FullHD 1080. Esto se traduce que nuestro plan más pequeño, el de 20Mbps, permite ver perfectamente Netflix en 3 equipos dentro de casa A LA VEZ sin pérdida alguna, ni cortes, y aún queda ancho de banda para otras cosas.

¿Y qué pasa con los juegos?

Existe una creencia muy extendida, pero a la vez muy equivocada, de que los juegos requieren un gran ancho de banda para funcionar correctamente. Sin embargo, esto está lejos de ser cierto. En los juegos en red, no se transmiten imágenes, sino simplemente coordenadas que indican la ubicación de los personajes y datos sobre las acciones que realizan, como disparos, saltos, giros, etc. Además, se transmiten las voces de los jugadores en caso de tener conversaciones grupales. En realidad, según nuestras mediciones, hemos encontrado consumos que van desde unos pocos cientos de Kbps hasta picos de 2 Mbps como máximo.

Lo que es realmente fundamental en los juegos son dos parámetros diferentes pero estrechamente relacionados: la latencia (ping) y el jitter. Hablaremos más detalladamente sobre ellos en otro artículo en el futuro, pero para resumir, la latencia debe ser lo más baja posible y el jitter (la variación de la latencia a lo largo del tiempo) debe ser lo más estable posible.

Estos parámetros NO DEPENDEN de la velocidad de conexión, sino de las condiciones de la red, como la distancia a los servidores de juego, el uso del WiFi en el hogar, las interferencias, la sobrecarga y muchos otros factores.

¿Y si tengo servicios en casa accesibles desde el exterior?

Cada caso es realmente único. Uno de los escenarios más comunes que encontramos está relacionado con las cámaras de videovigilancia. Las cámaras modernas de videovigilancia tienen resoluciones extremadamente altas, lo que permite una identificación clara de individuos y objetos. A medida que aumenta la resolución de estas cámaras, es cierto que se requiere un mayor ancho de banda.

Sin embargo, en la mayoría de los casos, una cámara por sí sola no es suficiente, ya que suele ir acompañada de un NVR (grabador). Este dispositivo permite almacenar las imágenes, ya sea de forma continua o en base a eventos como movimiento, sonido, horarios, etc. Esto nos lleva a un punto interesante: si una sola cámara requiere, por ejemplo, 3 Mbps de ancho de banda y tenemos 12 cámaras en nuestra instalación, las matemáticas nos indican que necesitaríamos 36 Mbps (3 Mbps x 12 cámaras). Sin embargo, ¡cuidado! Este consumo se produce en la red local, no en Internet. Aquí está la clave: desde el exterior, lo que se accede es al NVR, no a las cámaras.
Por lo tanto, el consumo de ancho de banda en el tramo INTERNET <-> NVR es mucho menor que en el tramo NVR <-> Cámaras. Esto significa que no es necesario contratar tanta velocidad de Internet, siempre que accedamos al NVR en lugar de hacerlo directamente contra las cámaras.

Un caso real: una oficina

Un ejemplo que no podemos pasar por alto es el escenario que ocurre en nuestra oficina. Aquí está la descripción:

– 6 puestos de trabajo
– 6 teléfonos VoIP
– 6 teléfonos Android con VPN a través de nuestra red Wi-Fi interna
– 1 centralita VoIP con un trunk hacia nuestro proveedor
– NOC (Centro de Operaciones de Red) que monitorea todas nuestras redes
– 16 cámaras de vigilancia

Estos puestos de trabajo están destinados a tareas técnicas de soporte, administración y gestión comercial, lo que implica realizar llamadas telefónicas, brindar soporte remoto, enviar correos electrónicos y algunos de nosotros también escuchamos música a través de la radio por internet, cada uno con sus propios gustos musicales.
Podría parecer que nuestras necesidades de conexión son muy altas, pero, para dar ejemplo, utilizamos una conexión básica de 20 Mbps y todo funciona correctamente.

Entonces ¿qué velocidad necesito?

Con todo lo anterior podemos echar algunas cuentas y hacernos una idea de nuestras necesidades. Si no estás seguro, siempre puedes empezar con la conexión más pequeña y luego subir si necesitas mayor capacidad: por suerte para ti nuestro equipo comercial está dispuesto a ayudarte a escoger el servicio adecuado. Nuestras ofertas están diseñadas para adaptarse a cada caso y además, con nuestro asesoramiento, tienes la garantía absoluta de funcionamiento para tus requerimientos específicos.