Una prueba muy común en cualquier usario de un acceso a internet de banda ancha para comprobar que todo funcione correctamente, es hacer un test de velocidad. Este simple gesto permite conocer datos importantes de nuestra conexión, como son la velocidad de descarga, velocidad de subida y latencia. Normalmente el test debe reflejar estos valores de forma más o menos acertada, lo cual nos da una indicación sobre el correcto funcionamiento (o no) de la conexión.
A pesar de ser un gesto aparentemente sencillo, el test de velocidad es algo más complejo de lo que parece y requiere tomar una serie de precauciones para asegurar que la medición realizada sea lo más precisa posible: es por ello que te enumeramos algunas consideraciones:
Nunca hagas el test usando la red wifi
Los test de velocidad ejecutados desde móvil tienden a no ser válidos por diversos motivos, pasamos a detallar los más habituales:
Posibles interferencias domésticas con otros equipos
Paredes y obstáculos
Rebotes de señal
Otros usuarios conectados
Haz la prueba por cable
La forma más fiable de hacer una prueba de velocidad y habiendo comentado ya los problemas que pueden surgir al hacerlos por wifi, es precisamente evitando la red inalámbrica y usando un PC conectado directamente por cable. Esta conexión es totalmente inmune a interferencias y carece de los problemas de las redes inalámbricas
Desconecta todos los equipos de tu red
Deja únicamente el equipo con el que vas a hacer la prueba. Esto es así para evitar, en medida de lo posible, que otros equipos puedan estar haciendo uso de la conexión y los resultados de tu prueba se vean alterados.
Ten en cuenta que los sistemas operativos actuales, tanto fijos como de móviles, son capaces de actualizarse de forma automática, así como las aplicaciones móviles: si haces un test de velocidad mientras hay una actualización en marcha, el resultado se verá afectado negativamente, mostrando valores por debajo de la realidad.
Asegúrate de detener todas las descargas
Para que tu medida sea lo más fiel posible, es fundamental detener todas las descargas en curso, así como cualquier aplicación que haga uso de internet. Debes cerciorarte también al hacer la prueba que tu sistema operativo no está en medio de una descarga de actualizaciones, o que el mismo antivirus esté actualizándose. Hablando de antivirus: es fundamental que uses uno de calidad y lo mantengas siempre al día con sus actualizaciones de firmas.
Consideraciones finales
Te recomendamos repetir el test en varias ocasiones y tomar el valor medio de todos los test: al igual que una descarga puede saturar tu conexión a internet y ofrecer medidas erróneas, los test de velocidad también pueden verse sobrecargados si en determinado momento hay muchos clientes haciendo pruebas de velocidad.
Por último, utiliza www.speedtest.net y escoge nuestro host para realizar el test de velocidad: obtendrás una medida muy precisa de la capacidad de tu conexión.
Otros test de velocidad, como fast.com, testdevelocidad.es y similares, dan resultados muy irregulares: esto es porque están optimizados para conexiones de fibra y dan preferencia a las grandes operadoras, penalizando a los demás operadores.
Por último, si tienes dudas con tu conexión, podemos hacer una prueba de carga remota a tu conexión y presentarte un informe técnico de capacidad de la misma.